Talleres, fundador del profesionalismo

El 18 de mayo de 1931, nuestra institución junto a otros 17 clubes crearon la Liga Argentina de Football e implantaron la práctica del fútbol profesional. De esta manera Talleres era parte de la elite del futbol argentino, compitiendo con los clubes mas poderosos.

 

La antesala de la decisión

En el seno de la Asociación Amateurs de Football existían dos tendencias sobre la situación del fútbol como actividad: por un lado, aquellas entidades que intentaban sostener su carácter amateur, y por el otro lado, los clubes que se inclinaban por el profesionalismo. Militaban en la máxima categoría 36 equipos, y existía una marcada diferencia entre los clubes “grandes” y convocantes, no solo económica y futbolística, sino en términos de convocatoria y de preferencias entre el pueblo futbolero.

Ya durante abril, el presidente Juan Nelusco Perinetti y el delegado ante la Asociación Francisco Agnelli, estaban al tanto de los movimientos y reuniones que realizaban representantes de los clubes “mas poderosos”, entre ellos Racing, Boca, Huracán, Estudiantes, San Lorenzo, Gimnasia, Platense y Vélez, cuya idea era organizar –en principio, dentro de la Asociación Amateurs- la sección profesional con un total de 14 equipos. La directiva albirroja reunida el 27 de abril en sesión extraordinaria, y en total acuerdo en participar de dicha sección, facultó al presidente y delegado para realizar las gestiones que creyeran convenientes para que Talleres participe de esa zona. Además se determinó que cada vez que fuera necesario se convoque a una reunión, debido a la importancia del asunto.

 

A comienzos de mayo Perinetti y Agnelli participaban de las reuniones de los clubes que buscaban el profesionalismo y “habían encontrado las mejores perspectivas para que el club Talleres ingresara a la sección profesional”, según dejaron asentado los registros del club. De todas maneras, surgió una dificultad: Talleres estaría en la nueva sección como club “invitado”, pues ya se hablaba de una escisión en el seno de la Asociación Amateurs. El club debió entonces tomar una decisión: “ qué camino seguir, o dar marcha atrás (con el profesionalismo) , quedando mal con esas prestigiosas instituciones, que en caso necesario se comprometían a apoyar a nuestra institución, o bien jugarse enteros y plegarse a las mismas, figurando en ese caso no ya como invitados, sino como organizadores del movimiento por el profesionalismo”, según lo registrado en la sesión del 6 de mayo. Es decir, debía mantenerse en la Amateurs, o desafiliarse de la Asociación.

 

El viernes 15 de mayo la comisión directiva sesionó nuevamente de manera extraordinaria. Convocada de urgencia, la reunión se llevó a cabo a partir de las 21:50 hs en la vieja secretaría del club, ubicada en Coronel Morón 5937 (actual Dr. Melo): sólo se trató el asunto que mantenía en vilo al pueblo futbolero argentino. Perinetti entonces, comunicó que había que tomar una resolución definitiva respecto al profesionalismo. Solicitó “discutir con calma, que al informar él sobre los trámites realizados, se comprometieran todos los miembros de la comisión directiva para que haciendo cada uno su composición de lugar, pueda tomarse una resolución que por ser tal vez de suma importancia para la vida futura del club, fuera antes ampliamente debatida antes de votarse”. En dicha reunión, se dio cuenta del panorama. La ruptura en el seno de la Asociación estaba al caer: a los clubes que propiciaban el profesionalismo, se habían sumado ocho entidades más que estaban dispuestas a prestar apoyo con su voto para llamar a asamblea dentro de la Asociación Amateurs. De esta manera, sumaban 18 instituciones, entre ellas Talleres, y habría mayoría de votos para imponer la sección profesional en la Asociación. Finalmente, no se realizó la asamblea y cada uno de los dieciocho clubes presentó conjuntamente la nota de desafiliación a la Asociación Amateurs el sábado 16 de mayo.

 

Talleres, entidad fundadora del profesionalismo

Finalmente el 18 de mayo dieciocho clubes crearon la flamante Asociación, entre ellas el Club Atlético Talleres. La directiva albirroja volvió a reunirse de forma extraordinaria en la noche de aquella jornada a efectos informativos y formales, pues el presidente Perinetti había rubricado con su firma el acta de fundación de la flamante Liga Argentina de Football.

En Bs. As, a los 18 días del mes de mayo del año 1931, reunidos los representantes de los clubs Atlanta, Boca Jrs, Chacarita Jrs, Estudiantes de La Plata, Ferrocarril Oeste, Gimnasia y Esgrima de La Plata, Huracán, Independiente, Platense, Quilmes, Lanús, Racing, River Plate, Tigre, Vélez Sarsfield, Talleres, San Lorenzo de Almagro y Argentinos Jrs, a fin de adoptar una actitud definitiva con respecto a la implantación del fútbol profesional, y después de deliberar ampliamente sobre la forma de llevarlo a la práctica inmediatamente, evitando dilaciones que puedan conspirar contra el éxito de la iniciativa, y considerando que precisamente las manifestaciones hechas públicas por las autoridades de la Asociación Amateurs Argentina de fútbol y representantes de otros clubs de oponerse a su realización dentro de la casa por todos los medios a su alcance legales y de fuerza, que aplazarían inmediatamente nuestra idea, imposibilitan nuestros deseos de solicitar la inmediata asamblea extraordinaria de reforma de los estatutos que permitía hacerlo, se pone a votación la renuncia de la afiliación a la Asoc. Amateurs Argentina de fútbol por los clubes aquí representados y se aprueba por el voto favorable de todos los presentes, haciendo constar que el club de Gimnasia y Esgrima de La Plata lo hace como lo dice en la nota individual, ad referéndum de la asamblea de sus asociados, y que los representantes de los club River e Independiente se abstienen de votar, por no estar autorizados a tomar tal determinación en este momento, por las resoluciones de sus respectivos clubes.

Acto seguido todos los representantes de los clubs mencionados resuelven declarar constituida la Liga Argentina de Fútbol, y designar una comisión de autoridades provisionales, formada por los señores Julio Planisi, Eduardo Larrandar, Enrique D’ Elía, y Dres. Luis Salesi y Jacinto Armando, encargada de todo lo concerniente a la constitución definitiva de la sociedad y arreglar momentáneamente la situación por la cual han de regirse los clubes afiliados e instalar la secretaría provisional en la calle Uruguay 627, primer piso D. los constituyentes resuelven declarar expresamente que con los clubs mencionados queda limitado el número de entidades que constituye la Liga con lo que terminó el acto y previa lectura, de la que se ratificaron todos los presentes, firmaron de conformidad”.

Finalmente, los asociados albirrojos ratificaron lo actuado por la comisión directiva en la Asamblea extraordinaria realizada el 21 de junio, y aprobaron la desafiliación de la Asociación Amateurs y la incorporación a la flamante Liga Argentina de Football.

 

Consideraciones finales

Sin dudas que la notable campaña del primer equipo en 1930 en la máxima categoría ( cuarto sobre un total de 36 entidades) envalentonó a los directivos albirrojos a tomar la decisión de incluir a Talleres en el profesionalismo. Por otra parte,  después de muchos esfuerzos mientras alcanzaba los 25 años de vida y celebraba sus bodas de plata, Talleres abonaba las cuotas correspondientes al pago del terreno de dos hectáreas de Rosales y Timote, tenía en su primera división futbolistas de fama internacional como el arquero Angel Bosio ( guardameta de la selección argentina en las olimpíadas de Amsterdam de 1928 y en el Mundial de Uruguay de 1930), valores destacados como los zagueros José Ravizza y Nicodemus Allan, el armador de juego uruguayo Luis Zubizarreta y el temible goleador Hugo Lammana. Talleres sumaba poco mas de 1.100 socios y a la par del fútbol crecía la práctica del básquet con la disputa de campeonatos internos; comenzaba una incipiente vida social que se desarrollaría notablemente en la década del 40’.

La inclusión de Talleres dentro de las entidades poderosas del fútbol, lo tuvo en la elite del deporte mas popular hasta 1938, cuando le tocó el sinsabor del descenso.

Pero esa es otra historia.

 

Ariel Cappelletti / Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.